Posiblemente sean tus pantalones favoritos y, por eso, se merece el mejor de los cuidados. Sí, hablamos de los jeans. Una vez que encuentras el vaquero perfecto sabes que será muy difícil encontrar otro igual. Por eso, es muy importante saber cómo debemos cuidarlo para que nos duren el máximo tiempo posible.
No los laves en exceso
Si queremos conservarlos en el mejor de los estados, lávalos cada 10 usos, aproximadamente. Si se manchan, puedes limpiarlos con un paño húmedo o un cepillo de dientes y con un jabón suave. Lavarlos muy a menudo no es una buena opción.
Sécalos al aire
Las secadoras nunca fueron (ni son) el mejor aliado para los vaqueros. La mejor opción es tenderlos al aire libre, ya que, de esta forma, no se deforman ni encogen. Tiéndelos al revés y a la sombra para evitar que el sol acabe con su color original y que los bolsillos se queden húmedos.
Lávalos en frío
Como mismo ocurre con el secado al aire, el lavado en frío mantiene el color original del denim. Además, evitamos que se decoloren y encojan. Lo ideal para su mantenimiento sería lavarlos a mano, pero difícilmente dispongamos de este tiempo en nuestro día a día.
Otros tips importantes:
- Lávalos aparte
- No los retuerzas, ya que las fibras pueden romperse
- No laves tus vaqueros nada más estrenarlos
- Solo debes plancharlos si tienen arrugas. Usa una toalla y los vaqueros para amortiguar el impacto
- Al guardarlos, cuélgalos con trabillas.